Claudio, de verdad que entiendo perfectamente que su mujer esté preocupada, porque su hija está con un tipo que va por la vida en moto, dando bandazos, a 200 km por hora, y no quiero darme cuenta de lo que pasa alrededor. Pero de repente aparece alguien que te dice que tranquilo, que aflojes. Y cuando aflojas, te das cuenta de las cosas.. Te das cuenta de que en la estantería, hay un trofeo de baile entre las botellas de tequila, que está sonando mi canción favorita. Que hoy es martes y trece, y que Rosana se fugaría contigo ahora mismo a cualquier parte del planeta. Cosas pequeñas Claudio, tu hija me enseña a ir despacio. Y eso me sienta bien...
Los sueños se tratan de creer, de luchar por ellos hasta lograrlos. Y es que.. los sueños no se mueren si tú no dejas de luchar. Es tan triste una persona sin sueños, sin objetivos.. no sé, yo no sé que haría sin mis sueños. Sólo sé que algún día los cumpliré y se lo pondré en la cara a quien dijo que no podría.
Yo no sé tú, pero yo..
Hoy voy a comerme el mundo, sin pensar en nada, voy a sonreírle a la vida, ya que ella no me sonríe a mí. Voy a reír, a chillar, a sonreír, a enamorarme, a bailar.. Voy a decir lo que pienso sin importarme los demás, voy a amar lo que yo quiera, y no lo que los demás quieran. Voy a gritar si me da la gana, gritaré hasta no quedarme voz, hasta que me falte la fuerza, hoy me siento segura, y hoy voy a comerme el mundo.
¿Y la amistad?
No sé.. Tengo pocos amigos creo que son los justos y necesarios para vivir, no quiero tener miles de amigos falsos, prefiero tener tan pocos amigos con los que los pueda contar con una mano pero siempre vayan a estar ahí, a tener mil y un "amigos" a los que no les importo una mierda. He tenido amigos a lo largo de mi vida que me he dado cuenta con el tiempo que nunca fueron amigos, no sé.. Duele. También tuve una amiga, pensé que esa amiga era mi hermana, lo visto es que no.. Que se alejo de mí, que se fue con otras, no pasa nada, tranquila, aquí me tendrás tú para siempre, aunque yo para ti ya no sea ni amiga.
Los hermanos.
¿Qué somos sin esos petardos que nos amargan la vida día a día? Pues no somos absolutamente nada, párate a pensar... ¿Qué harías tú sin tus hermanos? A veces nos odiamos, seamos el pequeño, el mayor, o el mediano, da igual nos odiamos como a nada, pero piensa en los buenos momentos... En los momentos de risa. Le doy gracias a la vida de no ser hija única sinceramente. Te quiero hermana.
Soledad.
viernes, 15 de febrero de 2013
Lo puedo sentir por mis brazos, en mi estomago.. En el temblor de mis piernas. Tengo miedo, tengo miedo de no ser capaz, de no llegar a quererme jamás. Dejarme sola, no quiero estar con nadie, no quiero que nadie me hable, no quiero que sintáis lástima por mí... Solo quiero sentarme a llorar, llorar hasta quedarme sin lágrimas, y es que... A veces me pregunto... ¿Por qué duele tanto? ¿Por qué no puedo ser como las demás? No sé... No pido ser perfecta, pido ser normal. No me interesa ser una Barbie, pero si aceptada. Todos queremos ser aceptados en este mundo, estamos hechos para eso. Pero resulta que en esta sociedad si eres distinto a el resto estarás condenado hasta el fin de tus días, al menos que cambies y te conviertas como ellos. Duele, pero es la realidad.
Y es que nadie es perfecto, aunque la sociedad piense que sí. Eso me destroza por dentro. Me hace sentir sola, y que nadie nunca me va a querer, no importa, estoy acostumbrada a que me hagan daño.
He tenido la felicidad, y no la he sabido valorar~
¿Mi sonrisa? Fingida.
Soy de esas personas que suelen sonreír diariamente.. Pero, me falla que mi sonrisa es falsa, que la tengo por ellos, por los que necesitan que yo sonría para ellos sonreír. Suelo estar enfadada con el mundo entero por mis problemas, problemas que nadie sabe, enfados con el mundo de los que nadie nunca se dan cuenta.. Me siento sola, más que nadie en este instante, y sé que alguien habrá que se sienta como yo, que rodeado de gente se sienta solo, que quiera llorar, y dejarse de tonterías de fingir sonrisas.
Estoy enamorada.
Estoy enamorada de una persona que ni siquiera sabe mi nombre, que no sabe de mi existencia, pero tranqui, me lo tomo con calma, estoy acostumbrado ha ser invisible para las personas, y no te preocupes.. Que duele, sí, más que a nada en este mundo duele el querer y no ser querido, pero no te preocupes, que también estoy acostumbrada. Me intento fijar en otra gente, en otros chicos, no sé.. Alguien que tal vez esté a mi alcance, pero es misión imposible. En mis 16 años de vida me he enamorado una vez, y lo veo hasta como mucho, yo solo sé que esta Canaria te quiere a ti, aunque tú no sepas de ella.
Que te quiero.. Y las palabras bastan.
¿Ves al chico de la foto? Es lo más importante de mi vida y aunque él no sepa que yo por él doy mi vida.
Lo puedo sentir por mis brazos, en mi estomago.. En el temblor de mis piernas. Tengo miedo, tengo miedo de no ser capaz, de no llegar a quererme jamás. Dejarme sola, no quiero estar con nadie, no quiero que nadie me hable, no quiero que sintáis lástima por mí... Solo quiero sentarme a llorar, llorar hasta quedarme sin lágrimas, y es que... A veces me pregunto... ¿Por qué duele tanto? ¿Por qué no puedo ser como las demás? No sé... No pido ser perfecta, pido ser normal. No me interesa ser una Barbie, pero si aceptada. Todos queremos ser aceptados en este mundo, estamos hechos para eso. Pero resulta que en esta sociedad si eres distinto a el resto estarás condenado hasta el fin de tus días, al menos que cambies y te conviertas como ellos. Duele, pero es la realidad.
Y es que nadie es perfecto, aunque la sociedad piense que sí. Eso me destroza por dentro. Me hace sentir sola, y que nadie nunca me va a querer, no importa, estoy acostumbrada a que me hagan daño.